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viernes, 27 de noviembre de 2020

Un negocio restaurantero y su fragilidad en tiempos de pandemia

  ¨No voy a mentir, han sido tiempos difíciles… pero también hemos encontrado que en estos momentos se puede encontrar la felicidad a través de la perseverancia.¨

Estas fueron las palabras de Manuel Robles Herrera co dueño de la franquicia María María. Cuyo objetivo junto con Adriana Ampudia Téllez ha sido sacar adelante un par de restaurantes durante la lucha de mantener a más de cien miembros de personal con empleo.





¿Momentos Inesperados?


De acuerdo con Isaac Esquivel en el artículo ¨El 65% de los  restaurantes en México morirá o tendrá alto riesgo de quebrar por coronavirus¨ en Forbes México, se informa que se perderán aproximadamente 300 mil trabajos en los próximos cuatro meses de la pandemia. 

En una entrevista con Notimex, Germán González presidente de la industria de restaurantes y alimentos condimentados (Canirac) explicó que en México existen alrededor de 500 mil unidades económicas que se dedican a la industria restaurantera. De estas, el 97% se compone de micro o pequeñas empresas.


La mayoría de estas son informales con pequeños puestos de comida, y el resto 3.0 está integrado por cadenas grandes. ¿Qué significa esto para las cadenas grandes? Se estima que se perderán alrededor de 20 mil puestos de personal en los siguientes meses, esta es una cifra verdaderamente pequeña a comparación de negocios restauranteros pequeños que tiene un estimado de 300 mil empleos. 


Uno de los obstáculos que enfrentan los negocios más pequeños es el seguimiento de normas sanitarias que ha impuesto el gobierno para el 2020 y 2021. Con una rigurosidad para mantener la clientela fiel se tienen que llevar a cabo muchos pasos para mantener la salubridad entre los clientes y empleados, solamente 40% del aforo se puede utilizar manteniendo dos metros de distancia entre cada mesa. Con estas nuevas normas implementadas, se han tenido que reducir los empleados en los establecimientos con el objetivo de mantener a flote el negocio.


¨Antes de la pandemia nos iba bien en el negocio, teníamos clientela fiel y hasta decidimos abrir en otra ubicación al otro lado de la ciudad… pero más o menos alrededor de agosto tuvimos que cerrar esa ubicación porque la verdad ya estábamos perdiendo dinero, en realidad fue difícil porque pues compramos ese terreno y construimos, le invertimos cuatro años de nuestros ahorros a ese restaurante y no se levantó, no iba ni un cliente cuando finalmente pasamos a semáforo Naranja.¨ Dijo la co dueña de Maria Maria, expresando su descontento con  toda la situación dejando en claro que para unos el efecto de esta pandemia ha sido mucho más grave que para otros. 

¨Tuvimos que declarar bancarrota en ese negocio, y fue muy doloroso, ya que Manuel y yo habíamos tenido ese sueño desde que estudiamos la carrera, no es fácil tener que dejar ir a empleados que dependen de ti… no solo ellos sino sus hijos también, familias enteras, pero la realidad es que no hay dinero.¨


Es importante entender las frustraciones de los dueños, empleados, e incluso clientela de los negocios restauranteros, no es fácil mantener los ánimos altos cuando uno está encerrado en casa por meses sin fin o uno no tiene trabajo y se tiene que preocupar por la estabilidad económica que va a la mano de ser un adulto, o tener miedo de perder tu empresa por una condición que no está bajo tu control. Todos elementos son aquellos que nos ayudan a fortalecer una resiliencia o fragilizar nuestras perspectivas como personas.


 Encontrando una solución para co-existir en la pandemia:


Todos los seres humanos tenemos ese impulso innato para querer salir adelante. 

¨Han sido mucha talacha, pero aquí seguimos, con el apoyo de todos nuestros empleados que ahora son familia  estamos poco a poco saliendo adelante nos comenta Manuel Robles Tellez. 


El querer triunfar en algo es  una opinión no exclusiva a Manuel Robles Tellez, ya sea un negocio o un proyecto pequeño, todos deseamos que nos vaya bien, y aunque las condiciones no sean favorables, este es el ejemplo perfecto de cómo una pareja y todo el personal alrededor de ellos pueden lograrlo. 


Un fin de semana es ideal para visitar esos negocios pequeños en vez de cadenas masivas, para disfrutar unos ricos chilaquiles o tacos o hasta un delicioso cóctel artesanal. Especialmente en momentos de pandemia es importante recordar que los negocios que más sufren son aquellos independientes. 

La importancia de apoyar a un negocio independiente puede significar el constante empleo para gente que vive del negocio restaurantero.






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