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viernes, 27 de noviembre de 2020

Menos ingresos para las películas mexicanas

 



El IMCINE (Instituto Mexicano de Cinematografía), ha sido uno de los sustentos del cine mexicano desde su creación en 1983, hasta el día de hoy.  Ha dado la posibilidad de que todas y todos terminen sus filmes o películas de la mejor manera posible, promueve el conocimiento de la cinematografía a públicos diversos a través de festivales en regiones de todo el país. En los últimos años el cine mexicano se ha ido ganando un lugar, ya que tiene una voz y una presencia gracias al trabajo que el IMCINE ha realizado.

Su responsabilidad es vital para diseñar, generar y ejecutar políticas públicas que impactan en la industria en todos sus ámbitos desde la escritura hasta el desarrollo, la financiación, la producción y la exhibición. Y aún que no se pueda creer el IMCINE, órgano rector del cine en México, tendrá un recorte de 46 millones de pesos para el 2021. Esto después de que la mayoría de morenista en la Cámara de Diputados desecharon las propuestas por parte de la Comisión de Cultura y Cinematografía, donde tuvieron la idea de incrementar 191 millones de pesos que la Secretaría de Hacienda contemplo en su momento.  

Recorte por parte del Gobierno de Enrique Peña Nieto. Menos presupuesto, pero mejores resultados

Hablemos de lo bueno, pues el Gobierno de Enrique Peña Nieto superó otros sexenios como el de Vicente Fox en el que solo se estrenaron 137 películas que vendieron solo 62 millones de boletos y al de Felipe Calderón en cuanto a venta de boletos e ingresos. La Cámara Nacional de la Industria Cinematográfica dio a conocer que solo del 2013 al 2016, el cine mexicano resurgió en la taquilla y ha vendido 100.9 millones de boletos con 4 mil 371 millones de pesos en ingresos.

Uno de sus logros es la participación del cine mexicano a nivel internacional, las películas nacionales se presentaron en 450 eventos en el extranjero como muestras, mercados, foros y festivales; de los cuales destacan los festivales de Berlín, Cannes, Venecia y San Sebastián. Esto significó una participación 28% mayor a la del periodo anterior.

La participación en estos eventos fue relevante ya que se obtuvieron 62 premios a nivel internacional. Todo esto a pesar de un recorte importante en el presupuesto del IMCINE que, en el 2017, recibió solo 275. 6 millones de pesos de un total de 523.8 millones que obtuvo en el 2012. Es decir, sufrió una caída de 47.39% en términos reales.

“No solo viene del sexenio de Peña Nieto, viene de todos los sexenios donde siempre hay recortes hacía el sector educativo y al sector cultural que de una manera van a ir en incremento de la producción o de la propia educación. En algunos momentos no se hablaba como recortes directamente al instituto porque iban directamente a la Secretaría de la Educación, quien regía el órgano cultural. A partir del sexenio de Peña Nieto es que se crea ya la Secretaría de Cultura y desde aquí los recortes ya no se veían reflejados en el cine, pero porque aquí iban en contra de lo cultural afectando al teatro, exposiciones, festivales, entre otras”, comentó C´Cañak Weingartshofer, Director Creativo.

Gobierno de AMLO propone recorte a 60 mdp al cine mexicano.

Andrés Manuel López Obrador propone un recorte de 60 millones de pesos a instituciones encargadas de producir y apoyar al cine mexicano. Dicho recorte afectará al IMCINE, al Centro de Capacitación Cinematográfica, a los Estudios Churubusco y a la Cineteca Nacional; se propone darles 285 millones de pesos, cuando este año se les había entregado 345 millones de pesos. De ser aprobado el presupuesto por el Congreso, se traduciría en 60 millones de pesos menos para estas instituciones.

“Veo muy mal que le resten fondos a la cultura de nuestro país. Desde un principio se había dicho que en esta 4T de López Obrador se venían beneficios para el cine mexicano. Más tiempos en pantalla y fondos para nuevos proyectos, de por si nuestro cine escasea de propuesta y no va más allá del morbo. Ahora con estos recortes creo que habrá mucho menos propuesta del cine nacional” comentó David Nicolás.

Esta sería la segunda disminución más drástica de presupuesto para el cine en los últimos años, luego de que en 2017 les quitaron 58 millones de pesos. En 2019 hubo un recorte de 43 millones de pesos, pues el gobierno de Enrique Peña Nieto dejó 231 millones, contra los 274 millones que destinó para 2018. AMLO aseguró que los artistas recibirían los mismos recursos de manera directa.

Al día de hoy se tiene mayor claridad respecto a lo que ocurrirá con los recursos que se destinaban a dichas producciones de películas. Serán 103 millones de pesos los que se destinen este rubro a partir del próximo año.

Nuevas alternativas sin estos estímulos.

El IMCINE no se queda atrás, lo que se esta haciendo es para toda la comunidad y se construirá un instrumento a través del cual el instituto dará estos apoyos, este instrumento se llama Programa Presupuestario de Subsidios, el cual proveerá los recursos, pero de manera directa, sin intermediarios.

Hay muchas alternativas, es cuestión de descubrirlas y trabajarlas. Es cierto que el cine financiado por el gobierno a lo largo de los años en muchas partes del mundo ha dado la posibilidad de que surjan grandes artistas y ha dado la posibilidad de tener un lenguaje más abierto o creaciones propias que de un cine comercial, pero esto no significa que nosotros como creadores o como artistas buscar la manera de seguir financiando nuestros proyectos sin la necesidad de recurrir a estos fondos.

“Una parte que va a terminar funcionando son las leyes que van en contra a los impuestos, o sea puedes deducir impuestos para ayudar un proyecto cultural, no solo cinematográfico, sino también cultural y muchas de las películas que vemos ahorita en pantalla se han financiado de esa manera, donde ha entrado Grupo Bimbo, Grupo Salinas, Inbursa, etc. Quienes apoyan con algunos de sus ingresos a la producción artística” comenta el Mtro. C’Cañak Weingartshofer.

El cine mexicano es resistente, su historia es de supervivencia. Me he de imaginar que el presupuesto para el próximo año, tendrá un mejor manejo y, por lo tanto, mejores resultados para la actividad institucional cinematográfica de nuestro país. Lo mejor es realizar cooperativas entre compañeros de la industria o cualquiera que desee hacer cine, hay evidencia de que a lo largo de la historia ha sido algo que ha funcionado para expandir la creatividad de los autores. Solo necesitamos una buena historia, una cámara y alguien que este delante y detrás de ella.

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