Breaking

lunes, 30 de septiembre de 2019

Álvaro Carrillo, Cien años de música al alma



Este año se cumplirá el centenario del natalicio del entrañable cantautor Álvaro Carrillo, quien le regaló a México y al mundo boleros inolvidables como El andariego, o Sabor a mí, composiciones románticas nacidas de nuestro país.



Nacido el 2 de diciembre de 1919, en Cacahuatepec, un poblado escondido en las costas oaxaqueñas. Se destacó en su localidad por ser un excelente estudiante hasta el grado de prepararse como maestro normalista. Para más adelante concluir la carrera de Ingeniero Agrónomo en la Escuela Nacional de Agricultura de Chapingo.

Pero Álvaro Carrillo no habría de dedicar su vida a la agronomía, desde joven ya demostraba su gran talento para la música y preparó los cimientos de un camino que recorrería toda la vida, el oficio de cancionero. Celia fue una de sus primeras composiciones, una canción inspirada en una chica que tenía perdidamente enamorado a Carrillo, así fue como de pronto el agrónomo ya le cantaba al amor; todos tenían claro que dedicarse a la música era su verdadera pasión.

Carlos Madrigal recomendó al trío Los Duendes que grabaran el tema Amor mío de Carrillo, resultando en un éxito que hizo que el artista se olvidara por completo de la agronomía para dedicarse a transmitir vivencias y sentimientos a través de sus canciones. Su obra ronda en sus más de 300 melodías que van desde chilenas, pasodobles, boleros y rancheras; todas estas interpretadas hoy en día con orgullo y melancolía por artistas como Marco Antonio Muñiz o José José.

El cantautor adquirió el reconocimiento que se merecía, compartiendo la música de su alma en espacios como la radio, televisión y teatros de revista, a la par de seguir trabajando arduamente en composiciones que pudieran permitirle a sus seguidores seguir sintiendo al amor en un buen bolero.

Pero el 3 de abril de 1969, Álvaro Carrillo y su esposa Ana María Incháustegui perdieron la vida cuando el automóvil en el que regresaban a la Ciudad de México fue impactado por otro vehículo a gran velocidad. El compositor de 49 años de edad murió a los pocos minutos del incidente, su esposa en menos de 24 horas y milagrosamente sus 2 hijos sobrevivieron ilesos.

Hoy en día es reconocido como uno de los compositores mexicanos más trascendentales, su obra se ha traducido a lenguas, como el zapoteco, amuzgo, maya y náhuatl. Esto no es gratuito, las canciones de Álvaro Carrillo tienen un lugar muy especial dentro del universo de la música mexicana inigualable tinte de melodías románticas, su poética sinceridad al amor y la vida, transforman su obra en un tesoro nacional.

Hace unos días se conmemoraba la desaparición de los 43 estudiantes de la Escuela Normal de Ayotzinapa, misma en la que Álvaro Carrillo y el guerrillero Lucio Cabañas habían cursado sus estudios. Cuenta la leyenda que Cabañas operaba clandestinamente en la sierra de Guerrero y mantenía cautivo al mismo Carrillo con el único fin de que le cantara sus creaciones; tras ser liberado a Carrillo se le obsequió un rifle y un machete, mismos que colgaba orgulloso en la sala de su casa, denotando su característica de siempre ver el lado positivo de lo que uno vive en su vida.

Canciones como Luz de luna, Seguiré mi Viaje, Dos horas, Pinotepa, El Andariego, El negro de la costa o Sabor a mí; regresan a la vida a Álvaro Carrillo cada vez que alguien las escucha o las canta, permanece como parte de todos como mexicanos, su música no pierde vigencia y se mantiene como un verdadero clásico de la historia artística y cultural de México.


No hay comentarios:

Publicar un comentario